martes, 2 de febrero de 2010

Si al menos te escuchases

Si al menos te escuchases

en la bóveda de un estómago que grita

murciélagos chirriantes

palabras en putrefacción


Si al menos te escuchases

las manos sedientas de otra sed

los ojos escapados al reflejo de otra ventana

los pies encarcelados en una sábana de lija


Si al menos te escuchases

como cuando las gaviotas eran olas

y las olas eran viento de sal

y la sal arena de rocas de pluma de gaviota


Pero tu sordera es fiel a tus oídos miserables

huecos

ecos


Si al menos ...

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